nosotros, los peregrinos del desierto
-con los cuerpos temblando en sus contornos-
nuestras sombras nos preceden en la marcha
en su velada difusa
el desierto tiene sed
el horizonte está tan próximo
el horizonte está por todas partes
el horizonte de la sed
nosotros, los peregrinos del desierto
-nos llama el horizonte de la sed –
los ecos preceden nuestras voces secadas
las sombras se vuelven sobre sí-mismas
ecos-caos que se vuelve sobre sí-mismo
la luz se concentra
borra las sombras
las voces se concentran
borran los ecos
quedan
el eco de la luz
la sombra de la voz
inmensa vocal átona - desierto
1 comentario:
QUE DURA ME PARECE ESA VIDA, ESPERO Y QUIERO QUE SEAN FELICES.
NO NOS MERECEMOS EL MUNDO, CUANDO VEMOS A NUESTROS HERMANOS SUFRIR
Y LOS QUE PUEDEN Y DEBEN HACER NO HACEN NADA:
LES DUELE, COMO A MI
SUFREN COMO YO
LE CORRE LA MISMA SANGRE EN LAS EN
LAS VENAS; ME DUELE EL DOLOR AJENO
ABRAZOS FRATERNALES...LEIRE
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